Las aeronaves Boeing 777 con motores Rolls Royce modelo Trent 800, serán objeto de revisiones y cambio de una pieza del sistema de combustible que debido a una falla en el diseño tiende a acumular hielo en ciertas condiciones, produciendo accidentes e incidentes como el protagonizado por un Boeing 777-200 en Heathrow (EGLL/LHR), sin víctimas fatales pero con daños de consideración en la aeronave al aterrizar, tocando fuera de pista, por pérdida de potencia; problema que también afectó a un Boeing 777-200 de la empresa Delta Air Lines en un vuelo a Atlanta (KATL/ATL) en el que se apagó un motor en vuelo.
La NTSB ha instruido a Rolls Royce la modificación de la pieza, la que estaría disponible recién en un año.
Fuente: ModoCharlie
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